El lugar, la santidad, y la cárcel: más comentarios sobre Pussy Riot

 

La Catedral de Cristo Salvador (imagen vía su sitio web oficial)

La Catedral de Cristo Salvador (imagen vía su sitio web oficial)

Después de las discusiones que hemos tenido en clase y las reacciones a mi blog previo sobre Pussy Riot, yo quería continuar a explorar la “oración punk” del grupo y sus implicaciones.  Específicamente, quería seguir explorando las ideas del lugar, de la santidad, y del impacto del encarcelamiento en un movimiento de protesta.

Primero, las teorías de Michel de Certeau pueden ayudar a aumentar nuestro entendimiento del lugar de la protesta.  La Catedral de Cristo Salvador en Moscú no es el lugar propio de Pussy Riot, sino uno de los lugares propios de la iglesia ortodoxa rusa.  La Catedral forma parte de la institución de la iglesia en el país, sirviendo a la vez como un símbolo de la religión y un lugar donde los feligreses pueden acudir a rezar.  Pero durante su protesta, Pussy Riot la transformó en un espacio practicado: la recuperó para ejercer su táctica de protesta en un momento fugaz, aprovechándose del simbolismo del espacio como una oportunidad para escandalizar a la iglesia y la nación entera.

Segundo, debemos hacernos las siguientes preguntas: ¿de dónde viene el simbolismo de la Catedral?  ¿Y de qué es exactamente un símbolo?  Podemos considerar estas preguntas en cuanto a la Catedral como un símbolo “sagrado” y “profano,” porque creo que tiene un significado fuerte en estos dos contextos.  Si pensamos en la Catedral como símbolo sagrado, debemos reconocer el sistema que sostiene esta categoría.  Este sistema está basado en la fe y la religión cristiana, específicamente ortodoxa rusa, que según Pussy Riot tiene una ideología conservadora y anticuada.  Pero, para los que pertenecen a la iglesia ortodoxa rusa, la Catedral quizá no es un lugar que representa una ideología dominante y mala.  Para ellos es mejor un lugar para unirse como una comunidad de feligreses, de comunicar con los sacerdotes,  y así, con Dios mismo.  De esta manera, y desde este punto de vista, el acto de Pussy Riot se puede considerar como una intrusión, una ofensa contra Dios.  Sin embargo, como podemos notar en la diferencia de la opinión de Pussy Riot y los que estaban ofendidos por su protesta, lo que es sagrado para unos no lo es para otros.

Por la otra cara de la moneda, unos pueden reconocer la Catedral como símbolo de la unidad nacional rusa, que representa la sobrevivencia del país que ha pasado muchas dificultades a través de los siglos—quizá reflejando la ideología del estado ruso.  Así, la Catedral también puede ser un símbolo profano.  En el sitio web oficial de la Catedral, dice que “la historia de la Catedral empieza en el 25 de diciembre, 1812.  Esto fue el día en que los últimos soldados del ejército napoleónico de 600,000 hombres eran echados de la Rusia.  Emperador Alexander I firmó un manifiesto que ordenaba la construcción de una magnífica catedral para honrar a Cristo el Salvador en Moscú como una acción de gracias a Dios y para honrar al ejército ruso victorioso.”  Con la revolución comunista, la Catedral fue destruida por el régimen de Stalin en 1931.  Desde 1994 hasta 2000, la Iglesia fue reconstruida.  En sentido figurado, la Catedral es el estado ruso, porque el edificio mismo ha pasado las crisis de invasión de ejércitos extranjeros, la revolución del comunismo, y la transición a la democracia y el nacimiento de una nueva época de democracia.  Así, la protesta de Pussy Riot es una subversión del estado ruso, y el régimen de Putin.

Estas varias perspectivas nos instruye que hay muchas diferentes interpretaciones de la “santidad” o “profanidad” de un lugar.  Podemos asumir entonces que estos dos conceptos sean flexibles, pero también fuertes.  Creo que Andrew ha hecho un comentario bueno e interesante cuando escribió: “el simple hecho de que Pussy Riot haya involucrado la religión en su protesta no se puede considerar como un proceso de sacrilegio sino como un proceso de inconformidad social que lleva algo que supuestamente es una verdad absoluta y lo pone en question.”

Finalmente, es importante considerar el encarcelamiento de tres miembros del grupo y su relación al futuro del movimiento.  Cody resumió muy bien el asunto cuando escribió: “cuando este evento ocurrió, tantas personas recataron con violencia y pasión contra el gobierno ruso en apoyo del grupo. Además, la mayoría de estas personas estaban fuera del estado de Rusia, especialmente grupos largos de Americanos. Al tiempo, a mí me parecía que quizá algo iba a cambiar pero, en realidad, nada pasó. ¿Y, ahora, casi un año después del evento, qué tenemos? Las miembros del grupo todavía están en la cárcel y nada va a cambiar.”  Creo que el vídeo que Emily ha compartido con nosotros puede ofrecer una respuesta a las preguntas y comentarios de Cody.  Este vídeo demuestra que todavía hay mucho entusiasmo por el movimiento por el parte de los miembros libres del grupo.  Las mujeres en el vídeo no sólo denuncian al gobierno de una manera muy fuerte, quemando la foto de Putin, pero también reconoce el apoyo internacional de artistas como Madonna y Greenday en un momento de agradecimiento público.  Además de eso, animan a los espectadores que comiencen sus propios “pussy riots” y que nunca dejen de luchar.  Me parece que el encarcelamiento de los tres miembros del grupo ha tenido un impacto importante en el movimiento: ha llamado la atención del mundo sin obstaculizar el movimiento por el resto del grupo.

Preguntas:

1)    Si las tres artistas no hubieran sido encarceladas, ¿no habrían aprendido tantosartistas—y tantas personas en general—por todo el mundo sobre su movimiento?

2)    En cuanto al espacio sagrado versus el espacio profano, es interesante notar una controversia reciente en la misma Catedral del Cristo Salvador.  Después de supuestamente vender iconos y velas votivas  en la Catedral, los directores de ella recibieron mucha crítica por introducir el consumismo en un espacio religioso.  En un proceso legal entre la Sociedad de la protección del consumidor ruso y la Catedral, el juez decidió que estaba bien si los directores vendieron cosas en la Catedral, haciendo una cosa “profana” en un espacio “sagrado.”  ¿Por qué—desde el punto de vista del sistema legal ruso— es esto más “aceptable” o “apropiado” que la protesta de Pussy Riot, otra cosa “profana?”

3)    ¿Pueden las protestas de Pussy Riot cambiar las cosas en Rusia?  ¿O no pueden lograr nada?

Fuentes:

http://www.xxc.ru/english/index.htm (sitio oficial de la Catedral de Cristo Salvador en Moscú…en inglés)

http://en.ria.ru/russia/20120809/175099770.html (artículo sobre la reciente controversia en la Catedral…en inglés)

Agregue un comentario